¿Debes VENDER en época de crisis?

¿Vender en época de crisis es igual a aprovecharse? 

Cuando les conté a mis “nuevos” alumnos este hecho, la mayoría asintió pero uno de ellos dijo:

“Pero Inge, ¿eso no es “aprovecharse” de la situación? ¿no te parece «carroñero» si yo ahora lanzo un producto o servicio?”

Y me parece una pregunta muy importante que quizás te está paralizando para que sigas generando los ingresos que tanto necesitas tú y tu empresa.

Porque el alquiler y la hipoteca las sigues pagando, la comida, la luz, y el gas también. Los gastos de tu empresa (a pesar de las medidas que se adopten) siguen corriendo…y o nos movemos, o esto se pondrá peor.

Cuando para ti, la venta es solo una transacción económica, puede que ese sea tu razonamiento (que es aprovecharse de la situación).

Para mí, aprovecharse de la situación es subir el precio del jabón de manos porque la gente lo necesita ahora más que antes y tiene miedo. Esto es aprovecharse de la situación y además es repulsivo.

Para mí, aprovecharse de la situación es hacer acopio de MATERIAL NECESARIO y revenderlo más caro o hacer negocio con él. Este tipo de venta me produce no solo rechazo, sino dolor y … lo voy a decir, PENA.

Para mí, esas personas no son emprendedoras ni empresarias, son otra cosa.

Aprovecharse del mal ajeno está mal. Muy mal.

No me gustan estas empresas, ni la gente que las gestiona.

Es hora de hablar claro. Si puedes ayudar es tu deber ayudar. NO aprovecharte.

Pero para mí hay una gran diferencia entre aprovecharte del mal de otros frente a seguir trabajando y generando negocio que ayude al mundo a prosperar y seguir adelante.

De hecho, la venta del miedo siempre me ha producido rechazo. La vemos constantemente en la política, en las “religiones”, en los vendedores de alarmas, médicos, y un sinfín de sectores…;)

En lugar de apelar al miedo para vender puedes, por ejemplo, apelar al deseo de superación, al deseo de ser la mejor versión de ti mismo/a, a OTROS motivos, que también harán que la gente desee tus productos o servicios pero motivados por algo diferente: EL CRECIMIENTO en lugar del MIEDO.

Si, como yo, ves la venta como un ACTO de ayuda en el que AMBAS partes se ayudan mutuamente, entonces tu visión y mentalidad cambia.

Mi proceso de “venta” se basa desde el principio en ayudar. Antes de la crisis, y en plena crisis igual. 

Ayuda a tu público y si puedes de alguna manera, hazlo también de manera gratuita (mándales emails con información de valor, crea artículos o documentación que les sirva, hazles reflexionar sobre alguna temática, apoya, colabora, entrega…) y después ofrece más ayuda para aquel que quiere más, y puede pagarla.

No dejes de invertir en tu negocio.

Yo no voy a dejar de invertir en mi negocio.

Voy a seguir pagando a la persona que cuida de mi hija para que yo pueda seguir trabajando, voy a seguir invirtiendo en mi negocio (ahora quizás más que nunca en determinadas áreas), voy a seguir con mi asistente y mi equipo.

Mientras pueda, seguiré.

Mientras esté bien, mientras la gente de mi alrededor y familiares o amigos estén bien, seguiré.

Debemos seguir, por ellos, por nosotros, por todos.

Vuelvo a esa sesión del viernes con los miembros de mi mentoría grupal.

Mientras les contaba todo esto, les animé a pensar: 

¿Cómo puede tu empresa se de ayuda AHORA? 

y lo que surgió después fue emocionante.

Una de las alumnas es Doctora de Urgencias en un hospital y tiene un proyecto paralelo en el que ayuda a los profesionales médicos a través de un programa de inteligencia emocional.

¿No crees que AHORA es uno de los momentos para ayudar con su misión?

¿No crees que podría crear una videoconferencia gratuita con médicos que necesiten su ayuda ahora?

¿No crees que eso, en un futuro, le traerá de vuelta algo aún más grande? 

¿No crees que es el momento de compartir por LinkedIn, u otras vías, el conocimiento del que ella dispone para ayudar a sus colegas? 

Fíjate cómo ya lo está haciendo: