El cambio de algoritmo en LinkedIn: claves para crear contenido que interese
El algoritmo de LinkedIn insiste en aclarar un aspecto importante: LINKEDIN NO ESTÁ AQUÍ PARA CONVERTIR TU CONTENIDO EN VIRAL.
El propio diseño de la plataforma, tal y como nos cuenta Shilpi Agrawal, no está preparado para que exista esta viralidad.
Quizás, en ocasiones, puede ocurrir que algún post tenga muchas reacciones y comentarios en un corto periodo de tiempo, pero esta no es la intención de LinkedIn.
De hecho, quizás hayas notado muchos menos “selfies” (y posts que pegan más en Instagram que en LinkedIn) rondando por ahí. Este cambio se debe a que en los últimos años, y en parte por la pandemia, el contenido que se comparte en LinkedIn es mucho más personal.
Y es normal, porque cada vez hay más gente que trabaja en casa y profesionales que deciden “montárselo por su cuenta” y esto se ha ido compartiendo en los últimos años. Según una entrevista realizada en Entrepreneur a Dan Roth y Alice Xiong, la creación de contenido ha aumentado un 42% desde 2021 a 2023 y cada segundo que pasa, tres profesionales más se unen a esta red social.
Eso sí, una anotación importante: hemos dicho que LinkedIn no está diseñado para que se consiga fácilmente esa viralidad, lo que no quiere decir que lo rechace si ocurre. De hecho, LinkedIn valora los selfies y el contenido personal, siempre y cuando contenga una narración personal con la que las personas se sientan identificadas.
Pero no lo olvidemos. La decisión de LinkedIn es clara: quieren más contenido relevante e informativo y menos contenido NO PROFESIONAL.
Por lo que, con el cambio de algoritmo en LinkedIn, ¿cuáles son las claves para crear contenido que interese y que LinkedIn decida mostrar?
¿Cómo crear contenido que interese con el cambio de algoritmo en LinkedIn? LA ERA DEL CONTENIDO PROFESIONAL
Antes de entrar en materia has de saber cuáles son los dos grandes cambios del algoritmo en LinkedIn en lo que respecta a tu contenido.
El primero: si publicas contenido, será más probable que tus contactos de primer grado vean el post antes que otros.
Esto significa que te interesa conectar con tus potenciales clientes más que nunca y “librarte” de aquellas conexiones que no lo son.
Está muy bien tener a tu primo entre tus contactos, pero ¿realmente es lo que necesitas?
Eso sí, si tus seguidores (seguidores = aquellas personas que pueden ver tus publicaciones porque han dado a “seguir” a tu perfil, pero no pueden mandarte mensajes privados) ven tus publicaciones y reaccionan a ellas, tu contenido tendrá más visibilidad que si lo hacen tus contactos más cercanos.
Obtendrás un 20% más de visibilidad porque LinkedIn entenderá que tu contenido es interesante más allá de tu círculo cercano.
Para conseguir seguidores, necesitas activar el modo creador de contenidos, y si no sabes cómo hacerlo, LinkedIn te lo explica.
Segundo, se le dará visibilidad al contenido que comparte consejos y conocimiento (recuerda estas palabras).
Porque esto es, sobre todo, lo que anda buscando LinkedIn en tus publicaciones.
Si detecta los consejos y el conocimiento una vez le hayas dado a “publicar”, LinkedIn compartirá ese contenido incluso fuera de tu red.
Pero, ¿qué son consejos y conocimiento?
Este contenido se refiere a aportar algo que de verdad enseñe a tu audiencia y le haga reflexionar, que le ayude a resolver sus problemas, tanto en el ámbito profesional como en el personal.
Es decir, debes publicar contenido que, tras ser leído, haya conseguido aportar claridad a un problema de tu cliente o, incluso, una solución a corto plazo. En definitiva: VALOR.
LinkedIn tiene cuatro maneras de identificar cómo aportas ese valor.
Y esas cuatro maneras son las que necesitas empezar a aplicar ya en tu contenido en LinkedIn si quieres darte a conocer en esta red.
Las cuatro maneras en las que puedes aportar valor en tu contenido en LinkedIn
1. Escribiendo a una audiencia concreta – Te digo cómo
Para conseguir que tu mensaje central sea efectivo, es fundamental dirigirte de manera concreta a tu público objetivo y a tus clientes.
Y por eso es tan importante que definas un problema concreto, una solución específica para un público concreto.
Debes conocer a fondo qué necesidades concreto tienen esas personas específicas.
Lo generalista y amplio no interesa a nadie.
Lo concreto y específico sí.
Debes ir hacia abajo, no hacia los lados.
/Go deeper, not wider
Sólo definiendo problema, solución y público podrás adaptar tu mensaje de manera apropiada para que tus clientes se sientan identificados con ese contenido.
Entre mis recomendaciones, añadiría que seas cercano. Piensa que tienes que demostrar que entiendes sus inquietudes y estás ahí, dispuesto a darle una solución.
Aquí la empatía juega un papel importante, y eso lo puedes conseguir a través de un lenguaje claro, directo, sin tecnicismos y enfocándote en los intereses de tu cliente.
Queremos hacer negocios con gente que nos cae bien. Si hablas con tecnicismos que tu cliente no entiende, te alejarás de él.
/Clear is Kind.
Unclear is Unkind.
Por ejemplo, alguna vez he escrito con prisa y he cometido alguna errata, pero quienes me leen nunca me lo han hecho notar ni hacen comentarios negativos al respecto, porque detectan que, tras esa errata, hay una persona y que las personas, a veces, nos confundimos.
Por lo que, recuerda: no se trata de crear un contenido perfecto y robotizado, sino un contenido real, con el que tus clientes se sientan identificados.
Un contenido que indique que hay una persona de carne y hueso que puede atender sus problemas profesionales.
2. Hablando sobre lo que sabes
A partir de ahora, cada vez que publiques, LinkedIn hará un análisis sobre tu bagaje profesional, el que tienes plasmado en tu perfil y, dependiendo de si coincide o no con lo que estás contando como “experto”, le dará más o menos visibilidad.
Por ejemplo, si en tu perfil dices que te dedicas a reparar motores de coche, pero escribes un post sobre la cría de elefantes, LinkedIn detectará que esa no es tu área de “expertise” y no le dará tanta visibilidad como si hablases de un sistema de propulsión eléctrica.
De ahí la importancia de tener un buen perfil que plasme tu producto/servicio. Mi recomendación es que repases cada uno de los apartados de tu perfil y los leas como si fueses uno de tus clientes potenciales.
Y siempre pregúntate: ¿Mi cliente sabría exactamente a qué me dedico y cómo le puedo ayudar?
Si aún no sabes cómo crear un gran perfil y un gran titular profesional, te lo cuento aquí: https://ingesaez.es/perfil-en-linkedin/
3. Si tienes comentarios “valiosos” en tu post
“Valiosos”, esa es la palabra importante aquí. Hasta ahora LinkedIn daba importancia y aportaba visibilidad a aquellas publicaciones que tenían muchos comentarios.
Algunos usuarios lo sabían e intentaron “trucar” al algoritmo con estrategias del tipo “comenta “hola” en mi post y consigue X”.
Para evitar estos comentarios “falsos”, LinkedIn ya no valorará tanto el número de comentarios sino la calidad de los mismos.
Entre estos comentarios sin valor se encuentran aquellos como “genial” o “estoy 100% de acuerdo contigo”.
Ahora LinkedIn quiere comentarios que hablen de la propia publicación, que hagan reflexionar y participar al resto de la red.
Pero, ojo, también valorarán de quiénes son estos comentarios. Los comentarios de gente aleatoria no tendrán tanta importancia como si provienen de profesionales que de verdad pueden encontrar utilidad o trabajar con aquello que comentas en tu publicación.
Y un extra a modo recordatorio: si contestas a los comentarios de tus posts, tu post tendrá más visibilidad. ¿Por qué? Porque LinkedIn interpretará que estás generando conversaciones con tu red, y eso es lo que LinkedIn desea por encima de todo.
MINI CONSEJO
Te recomiendo que una vez publicado tu post y recibidos los primeros comentarios, escribas tú un comentario nuevo haciendo una pregunta o una reflexión a tu círculo de contactos. Si consigues cinco respuestas en ese mismo hilo de comentarios, esa publicación obtendrá un 50% más de crecimiento.
4. Dando tu opinión/perspectiva
LinkedIn es una plataforma de networking y desarrollo profesional, por lo que tiene como objetivo fomentar una comunidad que se cuestione y reflexione sobre la información que recibe.
Desea ir más allá de las típicas publicaciones virales o entretenimiento superficial, como los videos de gatitos que inundan otras redes sociales.
En su lugar, LinkedIn busca ser un espacio donde los profesionales encuentren contenido relevante y colaborativo.
¿Cómo lo hace? LinkedIn utiliza inteligencia artificial para clasificar las publicaciones en diferentes categorías, incluyendo, por ejemplo, si una publicación contiene opiniones y/o consejos.
Por eso, si en tu publicación aportas tu punto de vista y está bien fundamentado, lo valorarán más que si publicas información con datos generales. Buscan personalidad y creatividad. Buscan que seas un líder de opinión.
LinkedIn busca individuos que compartan su expertise y experiencia, para generar debates constructivos y alimentar la interacción entre los miembros.
De hecho, el algoritmo de LinkedIn utiliza una técnica llamada «análisis de sentimientos» para comprender y evaluar el impacto emocional de las publicaciones realizadas en una plataforma o red social.
El análisis de sentimientos es una tecnología que permite identificar y clasificar las emociones expresadas en un texto.
El algoritmo examina el contenido de las publicaciones y trata de determinar si el tono del texto es positivo, negativo o neutral.
De esta manera, puede obtener una idea de cómo las publicaciones están afectando emocionalmente a las personas que las leen o interactúan con ellas.
Según Richard Van der Blom, LinkedIn da un impulso 3 veces mayor a tres tipos de publicaciones: el contenido positivo, el contenido informativo o el contenido que provoca una reflexión.
Coincido con esta afirmación no solo por experiencia propia sino también por la obtenida por mis clientes a los que gestionamos su presencia en LinkedIn en mi Agencia.
Por lo que mi recomendación es que procures ser positivo y personal en lo que escribes y en las imágenes o contenido visual que compartas.
Y la guinda del pastel es aquel contenido que, además de informar, añade una experiencia personal.
No se trata de hablar sobre tu vida, sino de compartir una experiencia profesional útil para tu red, pero en donde, además, añades tu toque personal, una lección de vida, por ejemplo. El típico post que gusta a la audiencia de LinkedIn es una historia personal que termina con un giro inesperado en el que hablas sobre tu negocio o tu profesión.
Como este ejemplo. Mi post más viral:
La puntuación de reacciones del algoritmo
El algoritmo es una especie de programa informático que está «evaluando» las publicaciones que se hacen en LinkedIn.
Cada vez que alguien hace algo con una publicación (como darle un «me gusta», comentar, o compartir), ese programa se activa y toma nota de lo que ha sucedido.
El algoritmo en LinkedIn clasifica esas interacciones según su importancia. Algunas interacciones tienen más valor que otras en términos de cómo afectan el crecimiento y visibilidad de la publicación.
Es importante tener en cuenta que la puntuación funciona por dos lados:
1. El efecto en el autor original de la publicación: si tú eres el autor original de una publicación en LinkedIn y alguien interactúa con tu publicación (por ejemplo, dándole «me gusta», comentando o compartiéndola), esa interacción activa el algoritmo y puede influir en la visibilidad y el crecimiento de tu publicación.
De nuevo, según Van der Blom y su estudio, dependiendo del tipo de interacción, se asigna una puntuación (las cuales veremos más abajo).
Cuanto más puntos sumes, más posibilidades tendrás de que tu publicación alcance a más personas en la red. En este caso, estos puntos son los siguientes:
- Si alguien le da un «me gusta» a tu publicación, eso suma 1 punto en la evaluación del algoritmo.
- Si alguien hace clic en «ver más» en tu publicación, eso suma 2 puntos.
- Si alguien comparte tu publicación con sus ideas, eso suma 3 puntos.
- Si alguien comparte tu post inmediatamente sin añadir nada, eso suma 6 puntos.
- Si alguien comenta tu post sin más interacción, eso suma 7 puntos.
- Si alguien comenta tu post y el autor original responde, eso suma 9 puntos.
- Si alguien comenta tu post y otro autor (otra persona diferente) responde a ese comentario, eso suma 11 puntos.
2. El efecto en la persona que interactúa: Si tú eres una persona que interactúa con la publicación de otro usuario en LinkedIn (por ejemplo, comentando en su publicación), esa interacción también afectará tu visibilidad en la red.
El algoritmo toma nota de tus interacciones y también te asignará puntos según el tipo de interacción que realices.
Por ejemplo, si tú comentas, obtendrás una cierta cantidad de puntos. Estos puntos pueden influir en la visibilidad de tus propias publicaciones o actividades futuras en la red.
De nuevo, cuantos más puntos sumes, más probabilidades tienes de que aumente tu visibilidad y se te muestre más a otras personas en la red. En este caso, los puntos son los siguientes:
- Haces clic en el “ver más” de la publicación de otra persona – 0 puntos
- Das a “Me gusta” a la publicación de otra persona – 1 punto
- Compartes la publicación de otra persona – 2 puntos
- Compartes la publicación de otra persona con tus ideas – 3 puntos
- Comentas la publicación de otra persona – 5 puntos
- Comentas la publicación de otra persona y recibes respuesta del autor del post – 7 puntos
- Comentas y recibes respuesta de otra persona que no sea el autor de la publicación – 8 puntos
Ahora ya lo sabes, ¡te toca interactuar y buscar esas interacciones!
Cómo funciona el algoritmo de contenido: entendiendo el mecanismo del muro (feed) de LinkedIn
Uno de los aspectos más importantes de LinkedIn es su muro, también conocido como feed. Esta es la zona central donde aparecen todas las publicaciones y actividad de tu red de contactos. Y cuando tú publicas, tú también apareces en el muro de otras personas.
Como es el centro de esta red social, LinkedIn dedica mucho tiempo y utiliza estrategias combinadas de revisión humana y algoritmos automatizados para filtrar contenido “de baja calidad” y spam.
Y a ti, como creador de contenido, te conviene conocer y aprovechar estas estrategias para publicar de manera regular con éxito. Así que lee con atención lo que viene a continuación:
1. La dinámica del contenido
LinkedIn quiere dejar de “agobiar” a su audiencia, por lo que hace un tiempo decidió mandar menos notificaciones. Y con “menos” me refiero a un 70% menos de notificaciones. Quizás lo hayas notado ya en tu cuenta. Ya no verás tanto ese numerito rojo en la barra de tu perfil en LinkedIn.
Eso quiere decir que el primer día que publiquemos nuestro post, se verá menos en el muro de otras personas. Imaginemos que creamos un post y le damos a “publicar”. Antiguamente, esta publicación tenía un 70% de visualizaciones el primer día, un 20% el segundo día y un 5% el tercero. Después, lo normal es que el post “muriese”.
Ahora, con la intención de LinkedIn de mostrar menos notificaciones, las visualizaciones de nuestro contenido funcionan así:
El primer día: 55% visualizaciones
Segundo día: 30% de visualizaciones
Tercer día: 10% de visualizaciones.
¡Un gran descenso de visualizaciones el primer día!
En cualquier caso, el tiempo que dedican las personas a leer tu post ya no es tan relevante. Antiguamente, si alguien pasaba tiempo leyendo tu post, el algoritmo te premiaba. Ahora, según Richard Van der Blom, esto ya no es relevante.
LinkedIn ya no te premia si tu post se lee durante mucho tiempo, así que ya no hay necesidad de escribir posts larguísimos o crear carruseles con muchas hojas. De hecho, mi recomendación es que escribas conciso, claro, con espacios y con frases lo más sencillas posibles. Nada de parrafazos complicados.
Economía de palabras, que se llama. 😉
¿Cómo se distribuye el contenido?
Para maximizar el impacto de tus publicaciones en LinkedIn y captar la atención de tus clientes, es importante que comprendas cómo se distribuyen tus contenidos. Este es el orden en el que LinkedIn muestra tus publicaciones para tus contactos:
Una vez le has dado a publicar, LinkedIn mostrará esta publicación a los contactos de primer grado y seguidores que más interactúan con tu contenido.
Después, se mostrará a los nuevos seguidores y conexiones que hayas conseguido en las últimas dos semanas.
En tercer lugar, se mostrará a los seguidores que son activos en LinkedIn.
Finalmente, se mostrará a tus conexiones.
Por lo que mi consejo es el siguiente: para destacar ante tu audiencia objetivo, enfócate en crear contenido que genere interacción. Haz una pregunta en tu post para que la respondan, utiliza una llamada a la acción. Fomenta el compromiso inicial de tus seguidores más activos para aumentar la visibilidad de tus publicaciones a lo largo de estas etapas.
Y cuando consigas interacción, aliméntala: responde comentarios, intenta generar una conversación. Haz preguntas a las personas que se han tomado el tiempo de interactuar con tu contenido. Demuéstrales que valoras su participación.
Esto te permitirá permanecer visible más tiempo.
2. Los clasificadores: ¿Qué son y cómo afectan a tu contenido?
Según nos cuenta Shilpi Agrawal, en su publicación “Detección de contenido viral de spam en LinkedIn”, existen dos tipos de clasificadores que detectan la calidad del contenido: los clasificadores reactivos y los clasificadores proactivos.
Los clasificadores proactivos predicen si el contenido es potencialmente viral o spam nada más publicarse el post.
Los clasificadores reactivos actúan como una capa extra de protección y funcionan comprobando las reacciones de la gente nada más publicarse el post, para intentar predecir el potencial de su viralidad y decidir si se sigue compartiendo o no.
¿Cómo se monitorea esa posible viralidad? Cada poco tiempo se analiza el alcance de la red del autor original, los miembros que interactúan con el contenido y las señales temporales como la velocidad de los me gusta, compartidos y comentarios, además de las puntuaciones de contenido (explicadas en el punto anterior).
Después, cada pocas horas, se toman medidas, como filtrar o enviar contenido para la revisión manual por parte de seres humanos.
Si al cabo de un tiempo ese post recibe más reacciones negativas que positivas, será denunciado y, probablemente, eliminado de LinkedIn.
En términos sencillos, LinkedIn analiza tres cosas tras publicarse un contenido: qué tipo de contenido es, si la gente reacciona positivamente o negativamente, y si parece ser spam.
Al estudiar estas tres cosas, entienden mejor cómo el contenido se vuelve popular rápidamente, si hay una relación entre lo bueno que es el contenido y cómo la gente reacciona a él (positiva o negativamente), y si los miembros denuncian o no ese contenido.
¿Qué son reacciones positivas y negativas en LinkedIn?
Reacciones positivas en LinkedIn:
- Me gusta (y variantes)
- Compartir publicación
- Enviar publicación
- Comentar publicación (positivamente)
Reacciones negativas en LinkedIn:
- No quiero ver esto
- Dejar de seguir
- Silenciar a xxx
- Eliminar a xxx de mis contactos
- Denunciar esta publicación
3. Las etiquetas del contenido
Existen tres maneras en las que se etiqueta el contenido producido.
LinkedIn utiliza unos clasificadores y etiqueta cada post como “spam”, “baja calidad” o “despejado” en tiempo (casi) real.
De momento no podemos definir con exactitud qué es un contenido “despejado”, pero en las políticas para la comunidad profesional del propio LinkedIn, ya nos indica que NOes existen y que, si los incumples, pueden convertir tu contenido en “spam” o de “baja calidad”.
Te dejo un resumen de las malas prácticas en el contenido en forma de listado:
- No incites al odio
- No publiques contenido intimidatorio
- No compartas contenido falso o engañoso
- No compartas material dañino ni impactante
- No amenaces, incites ni promuevas la violencia
- No compartas material que represente la explotación infantil
- No hagas insinuaciones sexuales o de otro tipo no deseadas
- No compartas contenido que promocione a organizaciones ni individuos peligrosos
- No promociones, vendas ni intentes comprar bienes o servicios ilegales o peligrosos
En resumen: deja el mal rollo fuera de LinkedIn, porque lo más probable es que acaben desapareciendo todas tus publicaciones ¡y quizás hasta tu cuenta!
Además, LinkedIn también nos da unos cuantos ejemplos de lo que ellos mismos consideran spam:
- Emojis o encuestas de reacciones que aumentan la interacción de forma artificial.
- Publicaciones que usan de forma engañosa las funcionalidades de LinkedIn (función de doble toque) para aumentar la interacción de forma artificial.
- Contenidos de tipo «carta en cadena», que piden hacer clic en «Recomendar», reaccionar y compartir.
- Comentarios o mensajes excesivos, irrelevantes o repetitivos.
4. Enfoque combinado: humano y automático
LinkedIn utiliza una combinación de soluciones humano + máquina para evaluar la calidad del contenido. Este es su proceso:
Primero, una vez se crea el contenido, de manera automática los clasificadores etiquetan el contenido y evalúan su potencial viralidad. Aquello que es más difícil de detectar, lo evalúan dependiendo de otro tipo de criterios, como las características de los miembros que han interactuado con el contenido.
Segundo, se permite a los miembros informar del contenido de baja calidad y aquel contenido que recibe una alta viralidad se revisa.
Después, si el contenido resulta sospechoso, se somete a revisión humana por el equipo de LinkedIn y deciden si el contenido es realmente spam o de baja calidad. De tal forma que están constantemente revisando si los clasificadores funcionan correctamente
En esta imagen puedes ver de manera gráfica cómo funciona el proceso de etiquetado y clasificación del contenido (la imagen original está proporcionada por Rushi Batt en su publicación sobre Estrategias para mantener relevante el Feed de LinkedIn).
5. Las capas de prevención
En este post publicado por Sanket Modi, Cómo funcionan nuestros sistemas de defensa contra el abuso de contenido para mantener seguros a los miembros, nos explica que LinkedIn utiliza tres capas de prevención para asegurarse de que el contenido que se publica sea respetuoso y profesional.
Este ayuda a filtrar el contenido que no debería estar en la plataforma.
Primera capa de protección: prevención automática
Esta es como la primera línea de defensa. Usan inteligencia artificial para analizar el contenido en cuanto e publica. Si la inteligencia artificial encuentra algo que parece malo, lo oculta para que solo lo vea la persona que lo publicó, pero nadie más.
Segunda capa de protección: detección automática y humana combinada
Si la inteligencia artificial no está segura de si algo es inapropiado, lo marca para que los humanos lo revisen. Si el equipo humano decide que está mal, lo quitan de la plataforma.
Tercera capa de protección: detección por parte de los usuarios
La última capa es cuando los propios usuarios de LinkedIn informan sobre contenido que creen que está mal o es denunciable. Entonces, los revisores humanos analizan el contenido y si va en contra de las reglas, lo eliminan.
Todas estas capas juntas ayudan a mantener un contenido bueno y apropiado en LinkedIn, y a eliminar el contenido que no debería estar allí.
No nos engañemos. Veo a muchos profesionales que buscan los “me gusta” y miles de seguidores.
Se ha convertido en una obsesión en las redes sociales y LinkedIn no iba a ser la excepción, pero LinkedIn quiere destacar como una plataforma profesional que promueve una perspectiva diferente, por lo que debes darla.
Más allá de perseguir la viralidad y el alcance masivo, debes buscar enfocarte en la estrategia y establecer relaciones de calidad.
Es más, muchos profesionales no podrán encontrar esa viralidad jamás, sólo por el hecho de que sus propios clientes no están en LinkedIn.
Es más fácil que una persona que se dedica al copywriting o al marketing encuentre esa viralidad que una persona que se dedica a reparar carretillas elevadoras.
Por eso, la clave para triunfar en LinkedIn no reside en la cantidad de seguidores, sino en la calidad de las conexiones que establecemos.
En lugar de esforzarnos por gritar más fuerte para que nos noten, debemos conectar y cultivar la relación con quien de verdad nos puede llegar a “comprar” (a nuestros productos/servicios).
No apuntes a la masividad, sino más bien a generar un impacto positivo en aquellos que realmente te necesitan a ti, como profesional. En esta red, ser auténtico tiene un mayor valor que seguir una fórmula para obtener muchos “me gusta”.
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1 comentario en «El cambio de algoritmo en LinkedIn: claves para crear contenido que interese»
Interesante artículo. Hoy en día el hábito de la lectura es muy bajo, todo mundo anda encima de una moto a gran velocidad, de manera que por lo general le dedica pocos segundos a un tema y continúa a millón en esa carrera. Si algo es auténtica y el buen lector lo reconoce, puede que se detenga y se tome un café virtual mientras lo Lee. JH